La tapa del contenedor con sensor permanece cerrada herméticamente y sin olores hasta que te acercas a de 20 cm con una hoja de papel o los restos de una manzana. El detector de movimiento abre la tapa automáticamente. Ahora puedes depositar cómodamente los residuos en el cubo de la basura. En cuanto el sensor deja de detectar movimiento alguno, la tapa vuelve a cerrarse. Para activar el sensor, basta con pulsar un botón del panel de control durante tres segundos.
El control automático mediante detector de movimiento tiene numerosas ventajas. La tapa de la papelera eléctrica solo se abre cuando se quiere tirar algo, el resto del tiempo permanece cerrada gracias a la tecnología de sellado termoplástico. Es una gran ventaja, especialmente con los residuos perecederos. Ya no tendrás que tocar la tapa y protegerás tu salud. Y, por supuesto, es muy cómodo que el cubo se abra automáticamente.
La papelera con sensor tiene una capacidad de 9 L. La resistente carcasa de plástico de alta calidad es se limpia muy fácilmente gracias a sus superficies lisas. El sistema automático funciona con dos pilas AA (no suministradas), por lo que podrás colocar la papelera donde quieras sin necesidad de una fuente de alimentación externa. Suministran energía al sistema automático durante más de 6 meses.