La robusta chimenea exterior ha sido fabricada en hierro fundido, material que absorbe y distribuye uniformemente el calor del fuego. El material combustible se coloca sobre una rejilla. Esto separa las cenizas a medida que arde para que la llama de la estufa no se apague antes de tiempo. Para calentar, utiliza distintos materiales, como madera, carbón o carbón vegetal, pero también bioetanol, por ejemplo. Con el atizador, distribuirás el combustible uniformemente en la estufa.
La estufa de leña para exterior dispone de una amplia abertura a través de la cual se puede añadir fácilmente el material combustible. El diseño abierto garantiza un suministro óptimo de oxígeno a la chimenea. Para que la llama se desarrolle de forma óptima y no se apague, el humo sale de la chimenea de jardín por un tubo largo. Cuando la chimenea exterior no está en uso, su aspecto proporciona un atractivo toque a cualquier terraza o jardín. El tubo de la estufa se protege de la lluvia por medio de una cubierta. La cubierta evita que la humedad se acumule en el interior.