Freidora eléctrica doble - 26 L - 10.000 W - grifo - zona fría - mueble bajo

Con la freidora eléctrica doble RCPKF 26DSH con espacioso mueble bajo, tu negocio estará perfectamente equipado. La capacidad de la cuba de 26 L y sus 10.000 W de potencia hacen que el aparato resulte ideal para uso profesional en restaurantes, bares o puestecillos de comida. Cuando se trata de freidoras, Royal Catering, el suministrador especializado en material de hostelería y aparatos de cocina, apuesta por una alta funcionalidad y un diseño práctico, así como por un manejo y un mantenimiento sencillos.

La freidora industrial dispone de dos contenedores equipados con una capacidad total de 26 L. Puede freír grandes cantidades de patatas fritas, alitas de pollo, pescado o aros de cebolla de una sola vez de forma rápida y sencilla. Gracias al rango de temperatura de 60 a 200 °C, que se puede ajustar independientemente para cada cuba, casi cualquier alimento, ya sea fresco o congelado, queda crujiente y en su punto. Las luces de control claramente ubicadas indican si el dispositivo se está calentando o si el aceite está a la temperatura óptima.

Con una potencia de 10.000 W, el aceite de esta freidora profesional alcanza la temperatura requerida muy rápidamente y puede preparar grandes cantidades de alimentos de forma perfecta y uniforme en poco tiempo. La zona fría integrada asegura un calentamiento más rápido, a la vez que asegura que los restos de la fritura que quedan en el fondo no se quemen. Esto mantiene el aceite en buenas condiciones durante más tiempo y protege los alimentos de la acrilamida. Los cestillos de freír, con unas medidas estándar de 250 x 250 x 120 mm, garantizan que los alimentos se puedan escurrir fácilmente y, en caso necesario, enfriarse en su interior. Los cestillos están equipados con mangos aislantes que te protegerán contra quemaduras durante el proceso de fritura.

La freidora eléctrica y el mueble bajo han sido fabricados en acero inoxidable. Este material de alta calidad es muy resistente a la oxidación, lo que alarga su vida útil considerablemente. Además, por sus propiedades higiénicas y sabor neutro, es perfecto para el trabajo en contacto con alimentos. Sus superficies lisas son especialmente fáciles de limpiar. Además, cuando la freidora no está en uso, la tapadera suministrada protege contra la suciedad y la contaminación.